Otra prueba semanal, canejo!

Buenas noches sean para todos, queridos amigos. Antes que nada, pedirles disculpas por las demoras. Efectivamente, el estudio de ghfilo fué atacado por una horda de gramáticos quienes destruían todo a su paso en busca del cerebro de todo esto (el núcleo, lo llamaban). Luego de un tiempo, frustrados, han debido irse con el rabo entre las patas, sin encontrarlo. [1]





Y se supone que yo me siente aca a escucharte decir estas ganzadas o puedo rebatirlas y re batirte [la posta].









Está en el contrato, David... no levantemos la perdiz...






Lo cierto es que la salida de Guiomar fue algo caótica pero hemos vuelto a la normalidad. Hubo menos votos que en la última votación. Diez votos menos. Por lo cual no nos alcanzó la guita para pagar el altísimo sueldo que la Sarlo nos cobra como panelista...







¿Eh? ¿Cuánto cobra ella?








...por lo cual, al menos hasta la proxima votación, es posible que no la vean.
Ahora vamos a ir directo para la casa... donde nuestros concursantes han recibido una visita misteriosa.







(Exterior de la casa. Frente a un piletón enorme se ve a varios participantes en pareja manipulando achuras. Martín está con Jorge, Marcela con Américo, Laura con Celina, la China con Silvia, Delfina con Walter, Augusto con Daniel, Roberto e Ines no se ven en escena. Frente a ellos, de espaldas a la cámara, un hombre de camisa y rebenque en mano)





Así no, carajo!! Hay que sacar la grasa, pero dejando una capita fina pa que se cocine mejor!







Pero es muy dificil esto! Ay! Me corté otra vez!





(la cámara se acerca y deja ver un minúsculo corte en el pulgar izquierdo de Martín, además de sus lágrimas contenidas)





(mientras suelta el chinchulín que sostiene en sus manos) Si querés corto yo y vos lo tenés.







No no, dejame... yo puedo.









Dale, maricón! Tenelo fuerte!







Bueno, pará un poco, si lo aprieto se me desliza.









Requete bien, marcelita. Así, rápido y fuerte. Castigue ese chinchulín!








Nosotros ya terminamos, Julio.




(mientras Daniel sostiene apática y asquerosamente el intestino delgado vacuno, Augusto mantiene en alto su reluciente Navaja de Occam)





Amalaya! Qué bien tajeao ese chinchulin. A ver si van terminando lo' otros, eh... Usté, china, apure o la vua tusar todita!



(La China, distraida, sigue cortando lentamente mirando a los ojos a la sostenedora de su chinchulin)




We're done.










Bueno gringa, ahora me lo lavan bien.




(entra Roberto con un vaso de vino en la mano, al ver a Julio se queda pasmado y suelta el vaso que [es de plástico] rueda al suelo y vierte su contenido)







(se sobre salta) Ahijuna! Este cristiano tiro tinto al suelo! Hiereje!








¿Mque mpajha?









Usté cayese y siga chupando! (le da con el rebenque)








Che Américo ¿no te molesta que la flaca le esté puliendo el facón al gil este?






Nah, Rober. (voz baja) Mira ¿te acordas cuando me agarraron con lo de la frula? Bueno, desde ahí me pase de rubro y con un paraguayo amigo me metí en la blanca. A la purreta esta en unos meses me la llevo para Asunción, asi que se vaya acostumbrando.








¡Explotador de mierda!








Y bueno, de algo hay que vivir. Con la renta completa no alcanza...







CHST! (magicamente empieza a sonar el rasgueo de una guitarra)






Atención pido al silencio
y silencio a la atención
que la prueba en esta ocasión
es para varones bravos
a ver quien le da la mano
pa' trenzar chinchulín mejor.

Si naides lo rialisase
será pa' todos tormento
les faltará el alimento
y andarán con migajas
hambre fiera en la casa
sólo las unias comiendo.

Y si son varios los gauchos
huapos, duros, que lo logren
por más que premios no sobren
será el que este güen cantor
con cencia y güen ojo elija
agasajo pa'l ganador.






What??







Qué para el que trence el mejor chinchulín va a haber un premio.







Y si no lo trenza bien ninguno nos cortan la ración de comida.










Ay Walter! Qué será de nosotros! (lo apreta de la pancita)









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[1] Si. Ahora también bajamos línea.